El verano ya ha llegado y, con él, las ganas de irnos de vacaciones y relajarnos. Tanto si este año ya te has ido de viaje como si está entre tus planes: a veces necesitamos tomarnos un día de descanso para reponer energías. Para ello, no hace falta que viajes a otro lugar, sino todo lo contrario: solo necesitas un poco de creatividad y rodearte de tus seres queridos para convertir un día libre cualquiera en un relajante día de vacaciones en casa.
Pero ¿qué caracteriza a un día así? En esta entrada te mostramos cómo es un día perfecto de staycation. Déjate inspirar y descubre tu entorno de una forma totalmente nueva.
En vacaciones, lo normal es que nos levantemos más tarde. Lo mejor de todo es que, de todas maneras, en casa puedes elegir la hora a la que deseas desayunar. Todos tenemos un desayuno preferido en vacaciones, así que ¿por qué no montar un pequeño bufé en tu propia cocina? Tanto si te decantas por unas tortitas, gofres, frutas frescas o un bol de smoothie: tómate tu tiempo para disfrutar de un desayuno maravilloso y comienza el día con energías renovadas y buen ánimo. Si hace buen tiempo, puedes desayunar en el balcón o en el jardín. Así, podrás tumbarte directamente para tomar el sol y relajarte todavía más.
En vacaciones nos gusta descubrir cosas nuevas. Aun así, con frecuencia desconocemos muchos rincones de nuestra propia ciudad. ¿Hay alguna exposición a la que siempre habías querido ir? ¿Quizás nunca hayas ido al mercadillo semanal o a un rastrillo? ¿O al fin tienes tiempo para ir a esa nueva cafetería que querías visitar desde hace tiempo?
Sin embargo, puede ser incluso más fácil: puedes, por ejemplo, ir a pasear a un barrio que no sueles frecuentar. Te sorprenderás al comprobar cuántas cosas te quedan por descubrir.
Como ves, hay muchas actividades posibles, pero lo más importante sigue siendo que hagas algo bueno por ti. Si tu día ideal de vacaciones está lleno de tranquilidad, relajación y poco ejercicio, entonces no dudes en ponerte cómoda en el sofá o tumbarte en una manta en el parque con tu libro preferido.
Tanto si has decidido dar una vuelta para descubrir nuevos lugares como si deseas pasar una tarde relajada, en vacaciones es imprescindible disfrutar de un poco de autocuidado y bienestar. Esto es algo que, lógicamente, también podemos hacer en casa sin problemas. Por ejemplo, puedes encender algunas velas aromáticas que desprendan un aroma reconfortante, ponerte tu mascarilla de rostro preferida o tomar un baño relajante. ¿Puede que también te apetezca darle cuidados especiales a tu cabello? Nuestro consejo: calienta aceite de coco virgen extra ecológico y aplícalo en el cabello dando un masaje suave, deja que actúe durante media hora y acláralo utilizando un champú. De esta manera, cuidarás tu cabello de una forma natural con un único ingrediente. ¿Prefieres relajarte haciendo ejercicio? Dedica entonces tu día de vacaciones a probar una nueva serie de ejercicios de yoga.
Invita a tus mejores amigos y organiza una deliciosa cena. Déjate inspirar por uno de tus platos preferidos en las últimas vacaciones o de recetas de países lejanos a los que te gustaría viajar. El broche final de un día de vacaciones perfecto puede ser un refrescante té helado que hayas preparado tú misma o un cóctel sin alcohol. Podéis poner unos altavoces y escuchar vuestras canciones veraniegas preferidas. De esta manera, vuestros pensamientos os llevarán de viaje y podréis disfrutar de un ambiente único.
«Estar en casa no es simplemente un lugar, es un sentimiento muy especial».
Esperamos que nuestras ideas te hayan para descubrir algo nuevo en tu entorno. ¿Tienes ganas de pasar más tiempo en la naturaleza? Descubre cómo reencontrarte con la naturaleza y con tu yo interior.