«Cuando tratamos de seleccionar algo por sí mismo, descubrimos que está conectado con todo lo demás en el universo».
- John Muir, naturalista estadounidense
El mundo nunca se detiene. Mientras fortalecemos la resiliencia de las explotaciones agrícolas, el cambio climático no da tregua. Cuando invertimos en asociaciones justas para mejorar la economía y los medios de vida locales, la pobreza persiste. La dinámica de la naturaleza se hizo especialmente evidente en febrero de 2022, cuando tres poderosos ciclones arrasaron la región de Manakara, en Madagascar, donde una asociación de YOGI TEA® trabajaba en la reforestación de áreas degradadas.
Cuando estos ciclones azotaron en rápida sucesión, los 510 agricultores y agricultoras de nuestro proyecto se vieron afectados y perdieron el 90 % de su cosecha de clavo. Las casas quedaron destruidas, las infraestructuras vitales dañadas y los precios de los alimentos aumentaron un 12 %.
Sin embargo, como ya sabía John Muir, el inicio de un cambio positivo en un área inevitablemente desencadena una reacción en cadena. Después de los ciclones, era necesario restaurar los medios de vida de los agricultores y sus tierras. En colaboración con nuestro socio Jacarandas, apoyamos la construcción de dos viveros de canela, clavo, eucalipto y acacia, donde se cultivan plantones para restaurar la tierra. Al mismo tiempo, estos árboles proporcionan a los agricultores una nueva fuente de ingresos. Ya se han distribuido más de 13 800 plántulas: 9 000 de canela, 2 300 de clavo y 2 500 de especies locales. Con el tiempo, nuestro objetivo es distribuir 35 000 árboles de canela y 13 000 de clavo.
Los árboles de canela y clavo de olor tardan varios años en ser productivos. Por ello, también promovemos la capacitación en agroforestería y apoyamos el mantenimiento de valiosas certificaciones ecológicas.
El clima, la tierra, la resiliencia humana, la restauración, la economía local: todo está conectado. Al plantar árboles para restaurar la tierra, también podemos mejorar los medios de vida de los agricultores y agricultoras. Cada esfuerzo nuestro, de nuestros socios y tuyo contribuye a que se produzca un movimiento de cambio positivo, donde cada mejora local conduce a un beneficio global para todos.