Un día bueno comienza ya la noche anterior. Si nos acostumbramos a hacer algo bueno cada tarde-noche, antes de meternos en la cama podemos eliminar con facilidad el estrés que se había acumulado durante todo el día. Lo ideal es que realices este ejercicio antes de irte para la cama. Así puedes reducir tu nivel de energía y soltar las tensiones que has ido acumulando sin percatarte de ello. Concéntrate en tu respiración, respira con calma y percibirás como tu cuerpo y tu mente se relajan. Cuídate y haz algo bueno para ti.
Buenos Sueños – La infusión para aquellos que terminan el día con suavidad. Pues la piedra angular de un buen día la puedes poner ya la noche anterior. Especialmente cuando nos recogemos en un equilibrio emocional de bienestar con una aromática taza de YOGI TEA® Buenos Sueños. La lavanda y la raíz de valeriana nos envuelven en una la de calor, el placer de las hierbas aromáticas como la menta y la salvia nos calman.
Este ejercicio es apto para todos los niveles.
Los movimientos conscientes le ayudan al cuerpo a desconectar y finalizar el día con suavidad antes de ir a la cama tras todas las actividades realizadas a lo largo del día. La combinación de asanas relajantes, las pinzas hacia delante y los giros consiguen que el sistema nervioso se tranquilice tras un día ajetreado. La rotación de los músculos delanteros y traseros de los muslos suelta las tensiones y toda la presión que has generado a lo largo del día, para que puedas dormir plácidamente y a la mañana siguiente despertarte con mucha energía. Disfruta este ejercicio y que duermas bien.
Pregúntale a tu médico si puedes realizar estos ejercicios.